Juan Izquierdo luchó hasta el último segundo, después de sufrir una arritmia cardíaca en el último partido con Nacional y entrar en urgencia con un paro cardíaco al Hospital Einstein de São Paulo, a sus 27 años.
Allí permaneció en terapia intensiva con respiración asistida, progresión y compromiso cerebral, mientras absolutamente todo el fútbol rezaba por él. Hoy estamos de luto.
Desde ahora su esposa Selena, su hijita de dos años y su bebé de apenas 10 días, tendrán un ángel que los cuidará desde el cielo.
Ojalá descanses en paz, Juan