De esta forma, alcanzará su nivel normal para principios de noviembre y habrá que empezar a estar alerta desde esa fecha.
Las últimas lluvias abundantes provocaron una crecida del Río Iguazú que repercuten en nuestra zona con una crecida en el Paraná, que en las próximas semanas llegará caudales de agua considerados normales.
Así lo confirmó por LT10, Juan Borus, subgerente de Sistemas e Información y Alerta Hidrológico del Instituto Nacional del Agua. El agua que llegaría, en los próximos 13 días, servirían para “acentar” el río a sus valores normales.
Sin embargo, el funcionario destacó que no se trata de una crecida significativa: «El niño como evento habitualmente significativo definió la zona de impacto en nuestra región (…) se ensañó con la cuenca del Uruguay, al punto de que en Paso de los Libres redondea en un pico de tres metros por arriba del nivel de evacuación, una crecida significativa».
Además, destacó que «este crecimiento que vamos a observar del Paraná a la altura del Santa Fe va a colocar aquí en Santa Fe en valores normales para la primera semana de noviembre».